Es fresca e ideal para el verano. Súper completa, con muchos colores y mucha variedad de ingredientes, incluso algunos que normalmente comemos cocidos (como el marrón) pero que está bueno probarlos crudos. Y el aderezo tiene una vuelta, que es lo que le da el toque tailandés a este plato.
Para 2 personas o acompañamiento para 4, necesitás:
- ½ taza de quinoa.
- ½ morrón rojo.
- 1 zanahoria.
- ½ pepino.
- ½ taza de arvejas frescas.
- 2 cebollas de verdeo.
- ¼ repollo colorado.
- ½ taza de maní tostado sin sal.
- Cilantro a gusto.
Para el aderezo:
- 2 cdas. de jugo de limón.
- ½ cdita. de aceite de sésamo.
- ½ cdita jengibre rallado.
- 8 cdas. de aceite de oliva
- Sal y pimienta
- Pizca de Sal.
- Salsa picante y azúcar (opcional)
- Primero hay que cocinar la quinoa y dejarla enfriar. En un colador fino, lavala bajo el agua varias veces, hasta que el agua salga clara y no forme más una especie de espuma.
Esto es importante, porque la quinoa tiene un compuesto llamado saponina que si no se enjuaga bien, luego al cocinarla le queda un gusto amargo.
- Luego de lavar bien la quinoa, colocala en una olla con el doble o triple de agua y llevala a fuego medio por 15/20 minutos, hasta ver que el aro que tiene cada grano está suelto y un puntito blanco en el centro.
No la cocines mucho porque queda muy pastosa, los granitos tienen que quedar blandos pero no hechos puré, parecido a como quedaría un arroz cocido (Si querés darle mayor sabor, podés cocinarla en un caldo). Colala, y esparcila en una fuente para que se enfríe.
- Lavá los vegetales. Pelá y rallá la zanahoria. Cortá el morrón y el pepino en pedacitos chiquititos y el repollo y la cebolla de verdeo (junto con la parte verde) cortalos en tiritas finitas.
- Una vez que la quinoa esté fría, colocala en un bowl junto con los vegetales cortados, las arvejas, el maní y el cilantro.
- En un bowl, mezclá el jengibre rallado bien finito, sal, pimienta, aceite de sésamo y el jugo de limón. Batí bien e incorporá el aceite de oliva en forma de hilo. Una vez todo integrado, probá y agregá un poquito de azúcar para darle un gusto agridulce y salsa picante si te gusta.
- Agregá el aderezo a la ensalada, mezclá todo bien y serví!
Tiene algunos ingredientes como el jengibre, cilantro o aceite de sésamo que usualmente no tenemos, pero si los incorporás de a poco, te van a empezar a gustar y le vas a agarrar la mano. Esta ensalada es ideal para probarlos, porque con tantos colores tentadores, ¿quién no se animaría a probarla?
Sobran Sabores 